Gracias a su compromiso y creatividad, más de 200 000 habitantes de comunidades rurales, indígenas, dispersas y periurbanas en cinco países acceden a servicios de agua, saneamiento e higiene.Ciudad de México, México. 1 de diciembre de 2022. – Tras la culminación de la primera fase del Programa Lazos de Agua, más de 200 000 latinoamericanos acceden a servicios de agua potable, saneamiento e higiene (ASH), superando los retos que aun enfrentan millones de personas en la región.América Latina avanza en la cobertura de servicios ASH. Sin embargo, 240 millones de personas aun carecen de una fuente de agua gestionada de forma segura y más de 490 millones de personas no tienen acceso a instalaciones de saneamiento gestionado de forma segura. De mantener el ritmo actual de inversión y de incremento en la cobertura, la región no alcanzará las metas a 2030 del Objetivo de Desarrollo Sostenible 6, según reportó el Programa Conjunto de Monitoreo (JMP) de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y Unicef. El sector reconoce que, para cumplir el ODS 6, se requiere mayor movilización de financiamiento público-privado y fomentar la innovación y la colaboración multisectorial.Por otro lado, tal como lo enfatizó la Organización de las Naciones Unidas (ONU), para brindar con éxito niveles adecuados de servicios de agua y saneamiento es necesario implementar los sistemas correctos. Es decir, instituciones con los recursos apropiados y capaces de brindar servicios y cambiar comportamientos de manera adecuada y resiliente.En este contexto, el Programa Lazos de Agua, lanzado en 2016, cierra oficialmente su primera fase en diciembre de 2022, superando sus metas. Junto con las comunidades, esta iniciativa del Banco Interamericano de Desarrollo, The Coca-Cola Foundation, Fundación FEMSA y Fundación One Drop generó soluciones técnicas y de cambio de comportamiento adaptadas a cada contexto. Como resultado, mujeres y hombres de todas las edades, empoderados, cuentan con habilidades y conocimiento para operar, administrar y mantener las soluciones de ASH. El Programa también fortaleció a microempresarios de la región y, por ende, a las economías locales.“El arte es el vehículo que nos permite llevar una temática relevante como el agua a las comunidades, y realmente hace la diferencia; esto lo hemos visto muy claramente en comportamientos como el pago de tarifas o el lavado de manos. Si fortalecemos este enfoque al integrar todos aprendizajes, podremos innovar y evolucionar el modelo que ya tenemos y, con ello, seguir construyendo confianza y sumar a nuevos aliados, porque necesitamos ser muchos más para lograr tener el impacto que requerimos”, dijo Lorena Guillé-Laris, directora de Fundación FEMSA, durante el evento de culminación de la primera fase del Programa.”El Programa Lazos de Agua es especialmente significativo para la Fundación One Drop. Por supuesto, por los resultados alcanzados en su primera fase, pero también por la forma en que se lograron. A través de un enfoque creativo centrado en las personas que cree en el poder del arte para suscitar emociones, acciones y cambios sostenibles, y con un ecosistema de ONGs, entidades públicas y privadas, artistas y, lo más importante, miembros de la comunidad. María de México, Jennifer de Colombia, Liz de Paraguay y Saqueo de Guatemala; estas son algunas de las 211.000 personas empoderadas a través de agua potable y saneamiento. Ellos son la razón por la que estamos juntos convirtiendo el agua en acción”, explicó Jean-Louis Dufresne, Fundación One Drop.La clave del éxitoLa colaboración, innovación y creatividad han sido claves en el logro de las metas del Programa, superando retos propios del sector como la cobertura de comunidades en situaciones vulnerables; disminución o eliminación de la defecación al aire libre; y el trabajo conjunto entre usuarios, proveedores locales, microfinancieras, entidades públicas, empresa privada y organizaciones de desarrollo. El enfoque de intervención del Programa, el Arte Social para el Cambio de Comportamiento™ (SABC por su sigla en inglés) de la Fundación One Drop, también ha permitido la adopción de prácticas saludables, así como la apropiación comunitaria de procesos técnicos y administrativos relacionados con sus sistemas ASH nuevos o mejorados.“El programa Lazos de Agua es único porque promueve la articulación público-privada que logra un mayor alcance y sostenibilidad, pero también promueve una construcción participativa, entendiendo que las soluciones deben venir de las personas de las comunidades”, dijo Andrea Mota, Directora de sostenibilidad y alianzas para Coca-Cola America Latina.Tras finalizar la primera etapa, Lazos de Agua traza la ruta de su segunda fase a 2030 para continuar impactando la vida de comunidades latinoamericanas, sumando esfuerzos con gobiernos y fomentando la movilización del financiamiento público-privado.Con base en lo construido, el Programa reforzará su estrategia sistémica a partir del modelo A·B·C para la Sostenibilidad™ de la Fundación One Drop, que incluye la vinculación de sectores y actores a nivel estratégico, técnico y financiero. También continuará apostando al arte social como herramienta poderosa para promover el cambio de comportamiento en las comunidades, incrementando la sostenibilidad de los proyectos y el impacto de las intervenciones.“Con la Fase I de Lazos de Agua pudimos comprobar que, al unir acceso, cambio de comportamiento a través del arte social y acceso a capital logramos mayor sostenibilidad y apropiación por parte de la comunidad de los sistemas de agua y saneamiento. Sus efectos comprobados y las lecciones aprendidas son los insumos fundamentales para diseñar la segunda fase, donde logremos escalar el modelo, uniendo a gobiernos, sector privado, sector público y las comunidades”, replicó Sergio Campos, Jefe de la división de Agua y Saneamiento del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).Un logro con, por y para las comunidadesAl finalizar el año 2022, más de 211 000 personas contarán con acceso sostenible y adecuado a ASH en Colombia, Guatemala, México, Nicaragua y Paraguay.Alrededor de 228 000 personas habrán participado en procesos del enfoque SABC. Más de 311 comités de agua habrán sido capacitados en temas de administración, gestión y mantenimiento de los sistemas de agua y saneamiento.Más de USD 341 530 habrán sido invertidos en productos y servicios ASH a través de microfinancieras.