- iWrc desarrolla un formato único e innovador para el proceso de enseñanza-aprendizaje especialmente diseñado para las necesidades de poblaciones vulnerables como son los recicladores informales.
- 390 recicladores informales de América Latina se gradúan como parte del programa piloto de Universidad Virtual iWrc financiado por Fundación FEMSA
Sao Paulo, Brasil a 6 de diciembre de 2023.- El programa piloto de la Universidad virtual iWrc inició en el 2020, a raíz de las necesidades de adaptación a distancia en el marco de la pandemia, y tras un arduo trabajo durante los últimos tres años, se ha consolidado como una plataforma y sistema de gestión de micro aprendizaje enfocado en recicladores informales, a través del cual se han capacitado 200 recicladores en Sao Paulo, Brasil, 40 en Argentina y 150 en Colombia.
La Universidad iWrc (Inclusive Waste Recycling Consortium, por sus siglas en inglés), inició como un proceso de capacitación para cooperativas de recicladores informales en Brasil, originalmente basándose en el estándar de certificación social SA8000 que ayuda a las organizaciones a demostrar su dedicación al trato justo de los trabajadores. iWrc realizaba capacitaciones presenciales en las que durante 1 o 2 días se cubrían todos los temas y al menos, se realizaban 1 o 2 visitas al año por cooperativa para corroborar o afianzar los aprendizajes. No obstante, la pandemia obligó a la transformación de este modelo hasta lograr el desarrollo de una plataforma de microenseñanza-aprendizaje entregado mediante el sistema de mensajería instantánea WhatsApp haciéndola de fácil acceso para este sector vulnerable.
Cabe destacar que se estima que 2 millones de personas en América Latina y el Caribe pasan largas jornadas recorriendo las calles de las ciudades en busca de papel, cartón, metal, vidrio, aluminio, plástico u otros materiales de los que obtienen su sustento al comercializarlos para su reciclaje. De acuerdo con el BID, en América Latina y el Caribe se generan 231 millones toneladas de Residuos Sólidos Municipales (RSM) al año, de los cuáles se recicla alrededor del 5%. Si bien, es un porcentaje bajo, sin el trabajo de los recicladores informales, este porcentaje sería menor o inexistente.
La crisis sanitaria que vivimos en años recientes con el COVID-19, evidenció aún más los riesgos latentes de este grupo social por la exposición directa a virus, enfermedades y materiales que ponen en riesgo su salud y seguridad. Por otro lado, en medio de la crisis climática que vivimos, es claro que, en materia ambiental, los residuos mal manejados constituyen una enorme fuente de gases de efecto invernadero.
“Los latinoamericanos necesitamos cambiar la forma en que nos relacionamos con los residuos para dejar de generar basura y recuperar el valor de cada uno de los materiales que utilizamos mediante la separación y el reciclaje de materiales. Y en este proceso, los recicladores informales, también conocidos como acopiadores de base, son parte fundamental para lograr una transición hacia la Economía Circular.” comentó Carlos Hurtado, Gerente de Desarrollo Sostenible en Fundación FEMSA.
Para el proyecto piloto se priorizaron 42 clases de un total de 126 videos con los que se construyó la Universidad. Estos videos se acompañan por otros materiales didácticos que son enviados mediante un Sistema de Gestión de Aprendizaje que permite a cada estudiante entrar en la plataforma y ajustar su propia curricula de aprendizaje. Después de otorgar cierta información básica, el sistema crea comunidades de aprendizaje en WhatsApp facilitando la medición del éxito del aprendizaje. En promedio un estudiante realiza todo el programa en un total de 42 semanas aproximadamente.
“Hemos tenido excelentes resultados y gran interés entre los acopiadores de base ya que cerca de 26% de los participantes del programa piloto terminaron el programa entero de la universidad antes del tiempo usualmente agendado. La Universidad iWrc identifica los vacíos de conocimiento entre los recicladores informales y cierra las brechas en áreas críticas ayudándolos a mejorar su calidad de vida, y al hacerlo, mejorar su ingreso y su salud. Con eso ganamos todos puesto que también se beneficia la cadena de reciclaje al contar con material de mejor calidad” agregó Michael Maggio, Presidente de iWrc.
“En Fundación FEMSA nos sentimos muy orgullosos de colaborar e impulsar proyectos no sólo innovadores sino con un amplio sentido humano que contribuyen a nuestra misión de cultivar prosperidad en América Latina para ésta y futuras generaciones,” dijo Lorena Guillé-Laris, Directora de Fundación FEMSA, y enfatizó que “la Universidad iWrc está transformando las vidas no sólo de los recicladores sino de sus familias ya que les permite ver su quehacer desde una perspectiva digna y de desarrollo en virtud de la contribución que generan en la industria del reciclaje. Gracias a aliados como iWrc estamos creando un nuevo modelo de micro aprendizaje, pero para llegar a más personas, necesitamos de la fuerza de otras organizaciones para que se sumen y contribuyan a este proyecto”.
Para realizar el desarrollo curricular de la Universidad iWrc, se tomaron de base documentos y estándares internacionales de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), de la Organización de Naciones Unidas (ONU), de Comercio Justo y de otros documentos de referencia internacional.
“Para el 2024 esperamos llegar a 4500 recicladores informales adicionales con la Universidad y esperamos crear una siguiente generación de contenidos para complementar la oferta educativa en base en los intereses y necesidades tanto del mercado como de esta comunidad. Contar con la confianza de los recicladores informales y de instituciones como Fundación FEMSA, HP, IKEA Social Entrepreneurship Foundation, entre otras organizaciones con las que trabajamos, es un privilegio y un compromiso que nos motiva a pensar que podemos alcanzar nuestra misión de conectar a los acopiadores informales con el resto de la cadena de manera que exista un beneficio mutuo” señaló Michael Maggio.
Fotografías ©iWrc aquíConoce el testimonial de Vinícius, miembro de la Cooperativa Coopersel de Brasil aquí